Si no tienes atención es porque no la mereces. Hablo de los grafiteros. Bola de tarados. ¿Para qué poner tu nombre o un seudónimo en una barda?. ¿Cuál es el punto?. No le estás dando un mensaje a nadie, ni te estás haciendo famoso, ni nada. Nadie importante te conoce y las personas que te conocen seguramente te odian.
No tiene sentido. Si ellos rayan una pared es “arte”, “expresión” y “rebelión”; pero si yo les rayo la cara con una navaja es “delito”, “agresión” y “una cita en el Ministerio Público el próximo sábado”. Estúpidas autoridades. Por otro lado, los grafiteros son cobardes, en serio. ¿Revolucionarios?. ¿Nunca se han preguntado porqué no hay graffitis en los edificios del gobierno?. Cobardes.
Los grafiteros son tan estúpidos como esa gente que llama a La Oreja para dejar sus mensajes sin sentido. Realmente me molestan: ”Niurka estás bien buena, olvida a Bobby”. Bien hecho, imbécil. Todos sabemos que la completa gama (usando la palabra "gama" vagamente; en realidad todos son grises) de seudo artistas de Teidiotiza está pendiente las 24 horas del día a los mensajes que le mandan perdedores como tú. La gente es demasiado corta de miras actualmente. La gente piensa en su pequeño cerebro que todo y todos debemos de estar al corriente con los sucesos de su insignificante existencia. “Marisela te amo, eres mi máximo”. ¿Porqué la gente gasta su dinero en eso?. ¿Cuál Marisela?. Hay millones de taradas llamadas Marisela. En dado caso de que el mensaje llegara, ¿quién la ama?. ¿Un imbécil que ve programas de chismes?. Pinche Marisela suertuda.
Bueno, ya que estamos de acuerdo con que absolutamente nadie te conoce (mucho menos si usas un seudónimo) ni se preocupa por ti, volvamos al tema original. ¿Quieres ser famoso, grafitero?. Entonces aléjate de mi pared, eso no vende. ¿Porqué no te lanzas de una azotea?. ¿Quien sabe?, quizá podrías salir en el noticiero de Lolita Ayala e impresionar a todos tus amigos. O quizá te sustituirían con la boda del Cibernético y Kawaghi, o algo así. Inténtalo de todos modos.
domingo, octubre 22, 2006
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